Nunca he escrito de comida. Creo. Igual ya había pensado hacerlo y lo voy a hacer ahora. Digo, Las leyes de Murphy la mencionan a cada rato. Pero de qué me sirve una tostada en el piso, del lado de la mantequilla...
A veces por ser tan simple no le ponemos atención, porque es algo de todos, o casi todos los días. Pan tostado.
Pero, ¿te has detenido a realmente saborear una tostada?
Una tostada bien hecha... Comenzando por el olor que desprende al tostarse ¿no es demasiado rico? La forma en que se derrite la mantequilla en la superficie es otro placer a la vista, no es algo ni rápido, ni lento. Si el pan está lo suficientemente caliente, tarda el tiempo justo para que, ni te aburrás esperando a que se deshaga, ni que se te pase el momento por pestañear... Podríamos comparar muchas cosas que deberían ser así, que deberían tener el tiempo justo y el mundo estaría mucho mejor. Pero volviendo a la tostada, cómo cruje... Si no tenés mucha hambre, te la podés comer sin problemas, más bien te abre el apetito. Si te estás muriendo sin probar bocado, te sabe a gloria! Las tostadas siempre quedan bien y combinan con todo. No mencionemos ya si le querés poner queso crema, mermelada o jalea. Así, con mantequilla, una tostada te puede alegrar el día.
Tenemos pan, hay otros que no... www.thehungersite.com
sábado, marzo 03, 2007
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